En este disco queda registrado parte de un año de trabajo con
AFROCUBA, Agrupación de la que me siento altamente agradecido
por su talento y su amistad.
Como siempre le debo especiales gracias a FRANK FERNÁNDEZ. Como
siempre por su amistad y por su talento.
Dedico todas las letras y las músicas de estas canciones;
las diversas horas que la invocan;
las 15.000 alquimias que las componen
y los esfuerzos que las hacen llegar a quien las escuche
A Luis Rogelio Nogueras,
o sea,
A Wichy el Rojo,
espléndido poeta cubano de apenas 40 años,
por hacerme creer, hace tiempo, que jamás partiría
y además demostrarlo.
Lunes, 13 de Enero de 1986,
Madrid.
Silvio Rodríguez