Domingo Rojo




Este domingo es especial domingo,
la vida lo colmó de actividad.
Hoy todos los relojes sonaron a las cinco,
la cuadra es un trajín que viene y va.

Hay sorbos de café en la madrugada
y toses de motores a las seis.
Hay risas y pañuelos antes de la mañana.
Hay voluntad de hacer amanecer.

Domingo,
qué buen pretexto das para cantarte.
Tu luna ha comenzado a saludarme
y parece como si la tierra fértil me esperase
―oh, domingo.

Domingo,
taller donde el sol puso residencia,
amor que sigue haciendo de herramienta
y ensancha las ventanas y las puertas.

Domingo,
es como si no me quedaran penas,
como si fuera siempre primavera,
como si la sed humana no supiese de fronteras
―oh, domingo.

Domingo,
verás crecer la vida de mis manos
cuando acaricie el sueño que yo amo
y el tiempo sea un domingo enamorado
―oh, domingo.