5 de Febrero del 2017
Por: Marianela Dufflar
Fuente: Cubadebate
Fotos: Iván Soca
Por: Marianela Dufflar
Fuente: Cubadebate
Fotos: Iván Soca
Canciones que han sido y seguirán siendo coreadas por varias generaciones de cubanos como Balada de Elpidio Valdés, El reparador de sueños, Pequeña serenata diurna, y otras más recientes, entre ellas, Viene la cosa y De pronto la Tatagua, marcaron el concierto número 80 de la Gira por los barrios, que viene realizando Silvio Rodríguez desde el año 2010 y que tuvo lugar el pasado viernes en Jesús de Monte, en la calle San José entre Tres Palacios y Quiroga, Municipio Diez de octubre.
Esta vez, aunque como dijera el trovador, su tropa no estuvo completa por diferentes razones, unas por problemas familiares y otras por compromisos profesionales, le acompañaron en el noble empeño Jorge Aragón en el piano, Jorge Reyes en el contrabajo y Oliver Valdés en la batería, quienes en unión del autor de Unicornio, se encargaron de iniciar el concierto, demostrando una vez más, la calidad artística de sus interpretaciones.
En esta primera parte, los vecinos del Barrio Jesús del Monte, recibieron el canto en poesía de Silvio y sus músicos, sorprendidos de que fuera cierto.
Jóvenes, niños y familias completas, disfrutaron de manera muy especial cada tema, reinando en el barrio, una especie de magia colectiva en las que sumarse al canto, logró hermanar, como siempre sucede en estas presentaciones, a público y artistas.
Los hermanos David Blanco y Ernesto Blanco, músicos, intérpretes y compositores, fueron los invitados especiales del trovador para esta presentación. Ambos asumieron la segunda parte, en la que contagiaron al público con las energías, dinamismo y profesionalidad que les caracterizan desde que se iniciaron en el ámbito musical cubano.
Para David, la propuesta de estar en el concierto 80 de Silvio por los Barrios, resultó ser el cumplimiento de uno de sus anhelos.
Se considera un hombre que ama el barrio, un hombre de pueblo y tener la oportunidad de estar cerca de la gente, vivir a Cuba desde dentro, es bien importante. Por ello respeta tanto la humildad de Silvio, al crear esta gira, por lo que sumarse a este proyecto se convierte, en reto y en alto orgullo.
El joven artista, en varias ocasiones, agradeció públicamente la invitación y dentro de su actuación, interpretó temas de su autoría como Vía Libre y Evolución por solo citar dos ejemplos, que además se haber alcanzado gran popularidad en Cuba, hicieron corear y bailar a los presentes, sin distinción de edad.
Ernesto Blanco, comentó que estar junto al maestro Silvio, además de ser un privilegio, es un alto honor como cubano y músico, que agradece mucho.
Por su parte, en su presentación, mostró las excelentes cualidades como guitarrista que posee y además de proponer temas conocidos, entre los que no faltó la canción Entre Amigos, que identifica un programa televisivo cubano con el mismo nombre, coreada con gran entusiasmo por todos los vecinos, estrenó dos, Graba tu nombre y A solas.
Nuevamente canta el barrio, con Silvio y su tropa. Nuevamente sus seguidores, cubanos y de otros confines descifran la encrucijada del mapa publicado en el sitio Zurrón del Aprendiz para llegar a tiempo y no perderse la posibilidad de ser testigos del canto necesario, del arte en virtud, de una gira interminable.
Esta vez, aunque como dijera el trovador, su tropa no estuvo completa por diferentes razones, unas por problemas familiares y otras por compromisos profesionales, le acompañaron en el noble empeño Jorge Aragón en el piano, Jorge Reyes en el contrabajo y Oliver Valdés en la batería, quienes en unión del autor de Unicornio, se encargaron de iniciar el concierto, demostrando una vez más, la calidad artística de sus interpretaciones.
En esta primera parte, los vecinos del Barrio Jesús del Monte, recibieron el canto en poesía de Silvio y sus músicos, sorprendidos de que fuera cierto.
Jóvenes, niños y familias completas, disfrutaron de manera muy especial cada tema, reinando en el barrio, una especie de magia colectiva en las que sumarse al canto, logró hermanar, como siempre sucede en estas presentaciones, a público y artistas.
Los hermanos David Blanco y Ernesto Blanco, músicos, intérpretes y compositores, fueron los invitados especiales del trovador para esta presentación. Ambos asumieron la segunda parte, en la que contagiaron al público con las energías, dinamismo y profesionalidad que les caracterizan desde que se iniciaron en el ámbito musical cubano.
Para David, la propuesta de estar en el concierto 80 de Silvio por los Barrios, resultó ser el cumplimiento de uno de sus anhelos.
Se considera un hombre que ama el barrio, un hombre de pueblo y tener la oportunidad de estar cerca de la gente, vivir a Cuba desde dentro, es bien importante. Por ello respeta tanto la humildad de Silvio, al crear esta gira, por lo que sumarse a este proyecto se convierte, en reto y en alto orgullo.
El joven artista, en varias ocasiones, agradeció públicamente la invitación y dentro de su actuación, interpretó temas de su autoría como Vía Libre y Evolución por solo citar dos ejemplos, que además se haber alcanzado gran popularidad en Cuba, hicieron corear y bailar a los presentes, sin distinción de edad.
Ernesto Blanco, comentó que estar junto al maestro Silvio, además de ser un privilegio, es un alto honor como cubano y músico, que agradece mucho.
Por su parte, en su presentación, mostró las excelentes cualidades como guitarrista que posee y además de proponer temas conocidos, entre los que no faltó la canción Entre Amigos, que identifica un programa televisivo cubano con el mismo nombre, coreada con gran entusiasmo por todos los vecinos, estrenó dos, Graba tu nombre y A solas.
Nuevamente canta el barrio, con Silvio y su tropa. Nuevamente sus seguidores, cubanos y de otros confines descifran la encrucijada del mapa publicado en el sitio Zurrón del Aprendiz para llegar a tiempo y no perderse la posibilidad de ser testigos del canto necesario, del arte en virtud, de una gira interminable.